La mediación se presenta en espacios educativos como una herramienta que nos ayuda a solventar las diferencias y fortalecer las relaciones entre las personas que convivimos en el centro escolar.
Según Boqué en 2007*, “la mediación es un intento de trabajar con el otro y no contra el otro en busca de una vía pacífica y equitativa para afrontar los conflictos en un entorno de crecimiento, de aceptación, de aprendizaje y de respeto mutuo. Es un proceso de comunicación horizontal a tres bandas en el que el/la mediador/a crea las condiciones para que los protagonistas del conflicto puedan compartir inquietudes y planteamientos, puntos de vista y limitaciones con el ánimo de elaborar el conflicto y ponerse de acuerdo… Entrar en un proceso de mediación significa aceptar unas normas muy sencillas: escuchar sin interrumpir, hablar sin faltar el respeto, mantener la confidencialidad acerca del contenido del encuentro e intentar cooperar a fin de llegar a un acuerdo”.
Analizando este concepto, podemos extraer los aspectos fundamentales de la mediación:
Por otro lado, se pueden destacar los siguientes aspectos positivos de la mediación escolar:
Es por todo ello que en el centro se ha puesto en marcha durante este curso escolar 2022/23 un proyecto de mediación escolar. Como protagonistas directos se encuentran los alumnos de los cursos de 5º y 6º al ser los encargados de mediar en los conflictos que surgen en el centro, los cuales han recibido la formación específica para llevar a cabo esta tarea.
Dicha intervención la realizan por parejas que van rotando cada semana por lo que siempre existen dos alumnos de estos cursos formando parte del equipo de mediación. Además, para que sirva de prácticas para un futuro cercano, durante las intervenciones que realizan les acompaña un "mediador en prácticas" que pertenece a 4º.
Como procedimiento de mediación, cuando hay un conflicto, el equipo de mediadores junto al "mediador en prácticas" acompaña a los alumnos implicados en la disputa a un espacio reservado para dicho procedimiento. Tras realizar la intervención, tanto los alumnos implicados como los alumnos mediadores, firman el acuerdo de mediación siguiendo el siguiente modelo, donde plasman por escrito los acuerdos alcanzados y se comprometen a llevarlos a la práctica:
*Boqué, M. C. (2007). Guía de Mediación Escolar. Programa comprensivo de actividades de 6 a 16 años. Barcelona: Octaedro.